redes sociales
Son la combinación perfecta. Un cocktail explosivo que no hace más que reportar beneficios tanto a las empresas como a los propios usuarios. Hablamos del comercio social, también conocido como social shopping o shopping 2.0, un conjunto de plataformas webs en el que los protagonistas principales son las redes sociales y el comercio electrónico.
De todas las características que presenta el social shopping, destacaríamos el alto nivel de interactuación entre empresa y usuario. Años atrás, el comercio electrónico se caracterizaba por presentar el producto en una plataforma web, añadirle una breve descripción y esperar a que el cliente se enamorara de él. No obstante, tras la aparición del fenómeno de las redes sociales a esta imagen le ha sido añadida una nueva característica y es que el propio usuario dispone de plataformas para conocer y analizar las recomendaciones de aquellos consumidores que ya han adquirido el producto.
En efecto son súper prácticas tanto para las empresas como para el usuario final. Como consumidor te clarifican el mar de dudas en el que te encontrabas. ¿Será práctica esta prenda? ¿Qué ventajas tiene frente al de la competencia? ¿Es verdad que si se la cae un poco de agua encima no le ocurrirá nada? Todas aquellas cuestiones que a la hora de comprar el producto se te plantean como existenciales son resueltas.
gente comprando sobre un teclado de ordenador
De este modo, gracias al gran éxito que están cosechando por su practicidad, el comercio social ya es todo un fenómeno. ¿La semilla esencial? Las recomendaciones y comentarios de los propios usuarios. Y no solo eso, también el respaldo de los diversos influencers o bloggers de referencia que participan en la herramienta, aportando así una mayor fiabilidad al propio consumidor. Además, la mayor parte de ellas permiten al usuario plasmar su comentario en las mismas redes sociales, expandiendo así dicha opinión entre los suyos y generando una viralización de la opinión todavía mayor.
¿ Sí o no?
Depende de lo que busque el propio comprador. Si eres de los que necesitas opiniones diversas al respecto antes de efectuar tu compra, eres un social shopper nato y deberías echar un ojo a algunas de estas plataformas. Por el contrario, si eres de aquellos que te seguro con tu criterio y la misma información que te proporciona la marca te basta para tomar tu decisión, no hace falta que seas un adicto al social shopping, pero sí que lo tengas en cuenta para futuras compras.
Hoy en día existen cientos de plataformas de social shopping. Si decimos Pinterest, Moodyo, Nuji, etc. ¿Te suenan de algo? ¡Seguro que sí!
Y tú, ¿perteneces al fenómeno del social shopping?
Javier Morera, Ejecutivo de cuentas. División Salud & Consumo
